El aborto es una tema muy controversial en nuestro tiempo, dado que se hablan de los derechos de la mujer por sobre los derechos de la vida del ser que comienza a formarse. Hay muchas discusiones respecto a si en verdad el feto tiene vida propia, o la tiene luego de algunos meses de embarazo.
Abordo este tema porque es un tema actual, conflictivo y normal en muchos países considerados, países civilizados.
Es un tema del que mucho se habla pero del que mucho se esconde también. Hay demasiado dolor oculto, mucha tristeza en las almas de aquellas mujeres que lamentablemente alguna vez abortaron. Por lo general no se atreven a decir esto a nadie y pasan su vida escondiendo esta verdad, creyendo que podrían abortar y luego de hacerlo se sintieron realmente mal.
Esto sucede porque su conciencia les acusa de que han obrado mal, les acusa de que han matado a su hijo; y cuando pasa el tiempo el dolor se hace cada vez más profundo. Este flagelo es uno de los bastiones más fuertes que satanás tiene, ya que no solo mata al ser que comienza a tener vida dentro del vientre de la madre, sino también mata a su madre lentamente, y digo esto porque la madre, aunque no lo confiese y siga su vida habiéndo abortado, lleva consigo el dolor como si colgara una mochila de gran peso sobre sus espaldas. Y este peso del pecado puede incurrir por ejemplo en “la falta de perdón a hacia sí misma” produciendo culpa, depresión, cáncer y hasta incluso suicidio.
Usted podría ser el caso de una violación, y quizás tomó esta decisión porque no quería tener un hijo producto de semejante crueldad. Es totalmente razonable y entendible su trágica decisión. Sepa que Dios no la juzga. Usted debe saberlo. Dios le ama.
Puede que Usted no crea lo que estoy diciendo, pero es mi obligación como hijo de Dios decirle que aunque usted lo niegue el Padre que todo lo ve, sabe que Usted se ha equivocado y también, Usted debe saber que su hijito le está esperando. Debe saber que el Padre ha recogido a su hijito y Él es su Padre, Él lo ha adoptado. Y debe saber además que su Enorme Amor le está guardando. Él la está esperando a Usted en el paraíso. Usted solo debe creer con todo su corazón y perdonarse por su equivocada decisión.
Con esta introducción Usted podría decirse entonces que yo opino que el feto tiene vida desde el primer momento en que es concebido. Pero haciendo caso omiso a mi opinión personal quiero llevarle a la Palabra de Dios, la Biblia.
Para ello voy a preguntar:
¿Cómo considera Dios el embrión concebido en el Vientre de la madre?
No hay duda alguna de que Dios lo considera una persona. Veremos tres ejemplos en los cuales a uno lo consagró, a otro le señaló para servirle y al tercero lo llenó de su Espíritu Santo.
1)Dios le habla directamente a Jeremías, demostrando que considera al niño en el útero una persona.
Jeremías 1:4-5 - Vino, pues, la palabra de Jehová a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre, te conocí; y antes que nacieses, te santifiqué; te di por profeta a las naciones.
2)Pablo escribe en el libro de Gálatas que fue separado por Dios para que le sirva antes de nacer.
Gálatas 1:15 - Pero aun antes de que yo naciera, Dios me eligió y me llamó por su gracia maravillosa. Luego le agradó,
3)El ser humano en el útero materno es un bebé.
Lucas 1:41-44 - Cuando Isabel oyó el saludo de María, la criatura saltó en su seno, e Isabel se llenó del Espíritu Santo. Y en alta voz exclamó: "Bendita tú entre las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre! Pero ¿por qué estoy tan favorecida, que la madre de mi Señor deba venir a mí? Tan pronto como la voz de tu saludo llegó a mis oídos, la criatura en mi vientre saltó de alegría.
Lo mismo afirma de Juan El Bautista
Lucas 1:15 - Porque él será grande delante del Señor; no beberá ni vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aún desde el vientre de su madre.
Con estos pasajes de las sagradas escrituras podemos entonces comprobar que Dios es el Autor y Dueño de la Vida.
La vida humana comienza con la concepción, pues el salmista David utiliza el pronombre personal “yo” (en varias formas) en los versos bíblicos citados.
Salmos 139:13-16: Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre. ¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien! Mis huesos no te fueron desconocidos cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo de la tierra era yo entretejido. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación: todo estaba ya escrito en tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos.
Conclusión: Si Usted ha pasado por esta situación. Si Usted sin saberlo ha matado a su hijo y siente en su alma que no tiene perdón de Dios por lo que ha hecho. Si usted vive atormentada y su dolor es muy grande, quiero que sepa que Dios le ha perdonado hace 2000 años atrás muriendo en la cruz del Calvario. Él llevó sus pecados en esa cruz y le dio plena libertad. Ahora Usted debe escoger ser libre o continuar siendo esclava de su dolor, de su angustia y de su pecado. Sepa que Dios está listo para bendecirle, sólo espera a que Usted decida a creer en Él, y decida creer para recibir su perdón y deje la angustia a los pies de Jesús.
Si está de acuerdo conmigo, lea esta oración:
Señor Jesús: Vengo delante de ti a pedirte que en estos momentos tu perdón venga a mi alma. Creo a tu palabra de que mi hijo está ahora contigo en el paraíso. Gracias Señor porque él está feliz junto a ti. Gracias porque tú lo estás cuidando ahora mismo. Recibo tu perdón y tu paz, que sobrepasa a todo entendimiento. Sana mi corazón, líbrame de mis angustias antiguas. Y recibo ahora el poder de lo alto para ser sana en el Nombre de Jesús. Muchas gracias por tu eterno amor. Amén.